Hoy estoy bajando el macuto de mi espalda.
Ése que durante años, muchos, me acompañó aportándome lo que creía que necesitaba pero en el que guardaba todo aquello que sentía me iba conformando. Varias veces lo vacié, pero como vacío lo volvía a poner al hombro de a poco se volvía a llenar. Hoy lo abro, para vaciarlo una vez más pero al tiempo dejarlo a buen recaudo porque ya no me acompañará mas. Hoy lo quito de mi espalda para no poder volver a cargar nada. Y al abrirlo lo que encuentro es tanta belleza guardada pudriéndose entre rejas que surge en mí un anhelo por agradecer mientras corto las cadenas. Sólo por hoy…
Hoy doy las gracias, las gracias a todos los que me habéis acompañado un tramo del camino. A veces dándome las fuerzas necesarias para subir una cuesta, otras directamente creando la cuesta (¡ay de esos pinches tiranos que convertidos en maestros tanto me habéis enseñado!) … a veces recorriendo junto a mi un gran trecho del camino, o simplemente deteniendo un momento vuestro caminar para tomar aliento junto a mi en la vereda del río. Algunos habéis señalado la luz que ha guiado mi caminar y me habéis mostrado que el camino se puede recorrer porque aunque en cuesta mi fuerza interior es siempre mi gran aliado sí soy capaz de amar, de soltar y de confiar.
A vuestro lado he reído, llorado, amado, crecido… en definitiva, a vuestro lado he vivido.
Hoy doy las gracias, vacío la mochila y me la quito de la espalda porque este nuevo camino he de aprender a recorrerlo sin nada, no porque peséis, qué va! sino porque pesan las cadenas con las que os até a mí, intentando retener la belleza que portabais… sin darme cuenta que al retenerla la mataba. Empiezo un camino nuevo cuyo destino será fundirme con la inmensidad del vacío volviendo a mi partida.
Por eso, este viaje se inicia sin macuto puesto que ya no hay nada que guardar, nada que necesitar, en verdad nunca lo hubo, salvo al amor que nutre los corazones. Si te apetece recorrer junto a mi el camino, marca tu ritmo, enfila tu senda y tal vez coincidamos en algún punto. Si así ocurriera nos refrescaremos juntos, nos reiremos juntos, compartiremos la belleza para luego seguir hasta fundirnos al final en el inmenso ser que nos engloba!
Gracias R.P.